Acabamos un ciclo

Nos quedan poco más de veinte días en 4º de la ESO. Pero no solo acabamos un curso, no es un curso más.

El año que viene, empezaremos el Bachillerato, que sólo el nombre asusta. Nos espera un año de elecciones, de dudas, de esfuerzo, y de mucho mucho trabajo.

Estos años anteriores, nos resultaban difíciles, si, para nosotros lo eran, pero poco a poco aprendimos a tener más miedo de lo que nos esperaba que de lo que teníamos que hacer en ese momento.

Creo que la idea de cambiar es buena, siempre que sea vista de manera positiva. También es un periodo de decir adiós, ya que muy pronto cada uno tomará su camino y nos repartiremos por las distintas universidades de España, Europa, o quizás más lejos todavía. 

Pasito a pasito, con tres añitos empezamos. Llegábamos tarde, nos íbamos pronto, y entre llanto y llanto, nos daba tiempo hasta a dormir un rato. Entonces, la idea de pasar al "cole de los mayores" nos hacía ponernos nerviositos, y la simple idea de crecer les ponía a nuestro padres malísimos.

 Año tras año, veíamos que acabábamos primaria, ya era todo un reto, mirabas hacia atrás y veías cosas como las tablas de multiplicar, el verbo "to be" o la diferencia entre nombre y adjetivo; con lo difícil que parecía y lo atrás que quedaba todo ya.

Entonces, sin apenas darnos cuenta, cambiamos otra vez. La frase que mas oíamos era "¡Que esto ya no es el colegio!"; algunos pensarían que no nos habíamos dado cuenta, y los que más notábamos el cambio éramos nosotros.

Y ahora, míranos, dispuestos a terminar también la secundaria, con proyectos en la cabeza y muchas ideas esperando a su posible realización, con grandes dudas entre que escoger, y sin apenas darnos cuenta de que ya está aquí, que en dos años nos vamos.

También es verdad, que el cambio que más diferencia nos va a suponer será cuando definitivamente nos vayamos a la uni. 

Aunque también , por otro lado, otra gran diferencia entre la ESO y el Bachillerato es que todos estos años, algunos se conformaban con simplemente aprobar; pero ahora ya no, la nota importa, y mucho, te juegas la diferencia entre hacer lo que te gusta y hacer lo que puedes.